20 abr 2008

Años noventa: Nuevos rumbos

Los años noventa no se presentaron con buenas sensaciones por el género. Regresaron YES con el disco de significativo título Union. King Crimson vuelve para ahora sí revitalizarse y reinventarse. Camel y otros siguen con fuerza, como Pink Floyd. Pero pasado tanto tiempo desde esos sesenta y setenta, las ideas nuevas y las mentes frescas las traen las nuevas generaciones, como es lógico.
Así irrumpen con fuerzas nuevas formaciones el "metal progresivo", variante que aporta una base de heavy metal pero con rumbos nuevos. Dream Theater irrumpe en escena desde finales de los ochenta, pero es en 1992 cuando sale a la luz el álbum Images and Words, que revoluciona el panorama musical. A pesar de ser altamente positiva la aparición de grupos con calidad y nuevas ideas, el género sufre de un creador revolucionario como fue Fripp en los setenta. Actualmente el rock progresivo se limita a la creación de discos de alta calidad, indudable y fresca en ocasiones. Pero parece estar muerta en cuanto a metas. No hay un objetivo más que hacer buena música. Y eso no es suficiente.

El Rock Sinfónico toma su nombre de la sonoridad de las sinfonías clásicas, que a partir de entonces se agrega a la paleta de colores del pop. La sonoridad sinfónica se

usa atravez de orquestas, secciones de cuerda o sintetizadores como el mellotron. Los primeros experimentos de este tipo se encuentran en canciones como Yesterday o Eleanor Rigby, de los Beatles . Tras caer en el descrédito a mitades de los 70, los experimentos que reúnen a un grupo de rock con una orquesta clásica retornan a finales de los 90, con discos como S&M de Metallica.
A mediados de los 90's aparece en europa una nueva forma de rock sinfónico o mejor conocido como Metal Sinfónico Operatico Orquestal, cuyo mayor exponente es el Grupo Sueco Therion, quienes utilizan los componentes rítmicos de un grupo de metal, similar al heavy metal pero acorde a la sincronización y multitud de una orquesta sinfónica.


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